CONTINÚA LA CREACIÓN DE EMPLEO: TEMPORAL Y PRECARIO

Se sigue creando empleo pero aún más temporal y precario

Hay que derogar las reformas laborales y perseguir la temporalidad y la parcialidad injustificadas, los “falsos autónomos” o las horas extras no pagadas

Los datos de la Encuesta de Población Activa publicados hoy por el INE, correspondientes al tercer trimestre del año, reflejan un descenso trimestral del paro de 16.200 personas (–0,5%), situando la cifra total de desempleados en 3.214.400. En un año, el empleo ha crecido un 1,77% (346.300 ocupados más) y la tasa de paro se ha reducido 0,63 puntos, situándose en un 13,92%. El comportamiento de la economía en el trimestre de verano, permite unos resultados cuantitativos aún positivos. 

Sin embargo, en términos cualitativos, de calidad del empleo, los resultados no son satisfactorios. Para UGT queda probado que en los momentos en los que se genera empleo, éste sigue siendo temporal y precario.

En el trimestre aumenta la ocupación y disminuye el paro en los hombres, pero cae el empleo y crece el paro para las mujeres. Desde hace un año, ha aumentado la ocupación entre los hombres y las mujeres, con similar intensidad (1,52% el empleo masculino y 2,08% el femenino), mientras el paro se ha reducido entre los hombres un 6,78% y entre las mujeres sólo un -0,14%. 

El sindicato destaca que, además del carácter estacional del empleo en estos trimestres centrales del año, se constata que la temporalidad y la parcialidad involuntarias siguen cronificadas en el mercado de trabajo español:

• La tasa de temporalidad se sitúa este trimestre en el 26,7% de los asalariados, 3 décimas más que el trimestre anterior. Son las mujeres las que sufren esta situación de forma más acusada (su temporalidad asciende al 27,7%).
• El 52,5% de las personas que trabaja a tiempo parcial, acepta esta situación por no encontrar un empleo a jornada completa; es decir, de forma involuntaria. El 74% de las personas trabajando a tiempo parcial son mujeres.

Tampoco se está corrigiendo el problema del paro estructural y del desempleo: el paro de muy larga duración afecta al 30% de los desempleados (950.700 personas llevan más de dos años buscando trabajo), con un volumen importante del número de hogares con todos sus miembros en paro (que supera de nuevo el millón de hogares).

Para UGT es urgente la derogación de las reformas laborales de 2010 y 2012. Pero hay que ir más allá, con medidas adicionales que persigan la temporalidad injustificada, el “tiempo parcial ficticio”, los “falsos autónomos”, las horas extras no pagadas y las desigualdades en el trabajo.

De forma complementaria hay que diseñar y reforzar las políticas activas desde lo público, así como la mejora de la protección de las personas, teniendo como objetivo la creación de empleo de calidad y con derechos. Todo ello es necesario para que España consiga encarar un crecimiento sostenible, permitiendo la disminución de los niveles de desigualdad y pobreza.

Datos de interés 

Según la Encuesta de Población Activa (EPA), el tercer trimestre de 2019 refleja 69.400 personas empleadas más que en el segundo trimestre del año (un 0,35%), hasta alcanzar 19.874.300. En términos desestacionalizados esta variación trimestral se sitúa en el 0,09%, inferior a la obtenida hace un año. 

El desempleo también disminuye en el trimestre, en 16.200 personas (‐0,5%), situándose el número total de desempleados en 3.214.400. En la serie desestacionalizada el descenso es mayor: del ‐1,72%. 

En cómputo interanual, las cifras muestran tanto el aumento del empleo (de 346.300 personas, un 1,77%), como la reducción del paro (111.600 personas menos en desempleo, un 3,36%). 

• Se observa, así, por un lado, un crecimiento de la ocupación que sitúa la tasa de empleo en el 64,54% (0,05 puntos más que en el segundo trimestre y 0,52 puntos superior al tercer trimestre de 2018) 
• y reduce la tasa de paro al 13,92% (0,10 puntos menos que el trimestre anterior y 0,63 p.p. inferior al mostrado un año atrás). 

En el año, la población activa señala una subida anual del 1,03% (234.700 personas), mientras la inactiva muestra un aumento del 1,09% (174.900 personas inactivas más). Por ello, la tasa de actividad baja una centésima en el año, hasta el 58,72%. 

La tasa de actividad femenina sigue siendo muy inferior a la masculina: 53,28% frente a 64,46%. 

En términos trimestrales las cifras de ocupación son positivas para el sector servicios (donde crece un 0,59% la ocupación, con 87.700 empleados más) y en la industria, con una subida del 1,85% (51.200 empleados más en este sector). En cambio, cae el empleo en la construcción un 0,51%, con 6.500 ocupados menos y, por su naturaleza estacional, en la agricultura (63.000 ocupados menos, un –7,79%). 

En términos interanuales también sobresale el sector terciario en valores absolutos (con 248.600 personas empleadas más, un 1,68%), mientras en términos relativos es la industria la actividad que destaca, con 90.100 ocupados más (un 3,31%). La construcción aumenta el empleo un 2,4% (29.700 empleados más), mientras la agricultura reduce el número de trabajadores un 2,88% (‐22.200). 

En el sector privado se han creado en el año 285.200 empleos y en el público 61.100 (lo que significa una subida del 1,74% y del 1,93%, respectivamente). En el trimestre crece la ocupación en ambos casos, 34.200 empleos en el público y 35.200 en el privado (1,07% frente a 0,21%). 

Por sexo, se observan diferencias. Desde hace un año, ha aumentado la ocupación entre los hombres y las mujeres, con similar intensidad (1,52% el empleo masculino y 2,08% el femenino), mientras el paro se ha reducido entre los hombres un 6,78% y entre las mujeres sólo un ‐0,14%. En el trimestre las tendencias por sexo son opuestas: aumenta la ocupación y disminuye el paro en los hombres, pero cae el empleo y crece el paro para las mujeres. Persiste la brecha de género en tasas de empleo (70,26% la masculina, frente a 58,82% la femenina) y en tasas de paro (12,17%, frente a 15,92%). 

Por grupos de edad, entre los hombres, aumenta el empleo en el trimestre en todos los rangos de edad (de forma muy notable entre los menores de 25 años), excepto en el tramo de 30 a 44 años, que se reduce. 

En el caso de las mujeres sube la ocupación también hasta los 30 años y levemente de 50 a 54 años. Para el resto de edades, de 30 a 49 años y por encima de los 55 cae el empleo. En un año, la tendencia es similar y los tramos de edad afectados por el descenso del empleo se concentran, en el caso masculino, de 25 a 29 y entre los 35 y 44 años; en el femenino, de 20 a 24 y entre los 30 y 44 años. 

El número de asalariados ha aumentado desde el segundo trimestre en 101.700 personas (un 0,61%), y aumenta en cómputo anual en 356.400 personas (un 2,17%). Debido a la temporada de verano, se produce un aumento del empleo temporal en el trimestre, con 76.600 asalariados más (un 1,74%), mientras el empleo indefinido sólo sube un 0,20% (25.100 personas). 

En el año el empleo temporal ha descendido un 0,70% (31.500 menos), frente a un aumento del 3,25% del indefinido (387.900). Como consecuencia, la tasa de temporalidad asciende en el trimestre hasta el 26,7% de los asalariados (27,7% entre las mujeres), tres décimas más que el trimestre previo, pero siete menos que en el tercer trimestre de 2018. 

La temporalidad persiste como uno de los principales problemas del mercado laboral español. Sigue constituyendo uno de sus elementos estructurales, aumentando según se recupera la economía y el empleo, y muy ligada a los trimestres en los que se genera empleo estacional. Es decir, en los momentos en que hay cierta recuperación del empleo, es claramente de carácter temporal (especialmente en los trimestres de actividad estacional), reflejándose en nuevos aumentos de la tasa. 

Por su parte, se produce una reducción en este tercer trimestre del empleo a tiempo parcial (‐162.300 personas), lo cual constituye una de las características del trimestre de verano, debido al mayor uso que hacen las empresas de los contratos temporales a jornada completa. No obstante, en el año aumenta la parcialidad en 75.400 personas. (46.900 mujeres). Asimismo, la parcialidad involuntaria sigue manteniéndose elevada: 1.463.900 millones de ocupados trabajan a tiempo parcial por no encontrar un empleo a tiempo completo (el 71% de estas personas son mujeres). 

El porcentaje de parcialidad involuntaria se encuentra en el 52,5%. A ello se añaden los datos de desempleo de larga duración. En el tercer trimestre de 2019 el 43,5% de las personas en desempleo lleva más de un año en esta situación, con una elevada incidencia de las personas que llevan buscando empleo más de dos años (29,6% de los desempleados). 

En concreto, casi 1,4 millones de personas buscan trabajo desde hace más de un año y 950.700 desde hace más de dos. Y más de un millón de hogares tienen a todos sus miembros activos en paro.