DEBE PROTEGERSE A LOS TRABAJADORES DE LA OLA DE CALOR

UGT desarrolla la campaña de la CES para proteger a los trabajadores de la ola de calor

La Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha puesto en marcha una campaña para proteger a los trabajadores y trabajadoras de las altas temperaturas, con motivo de la ola de calor de los meses de verano, y para prepararse para un futuro en el que es probable que estos retos se presenten con mayor frecuencia.

La CES cumple así con la resolución aprobada en la reunión del Comité Ejecutivo del 18 y 19 de diciembre de 2018, sobre la necesidad de una acción de la Unión Europea (UE) para proteger a los empleados y empleadas de las altas temperaturas.

La Unión General de Trabajadores desarrolla esta acción y advierte sobre los riesgos que conlleva realizar trabajos a la intemperie o actividades en lugares cerrados como cocinas, hornos, etc. donde sin duda se puede llegar a temperaturas extremas.

Las altas temperaturas pueden poner en serio riesgo la salud de estas personas. Por ello, el sindicato pide extremar las precauciones y el estricto cumplimiento de la normativa por parte de las empresas, en lo relativo a la prevención de riesgos laborales. Insta especialmente al cumplimiento de la jornada intensiva de verano para aquellas actividades que se desarrollan al aire libre.

El sindicato alerta sobre la clara infranotificación de este tipo de accidentes, derivados de estar expuestos a altas temperaturas e insiste en la necesidad de adoptar medidas preventivas; y demanda, además, a las administraciones públicas y a la Inspección de Trabajo que extremen la vigilancia en el cumplimiento de la normativa y los convenios colectivos en relación con la prevención de estos riesgos laborales.

Resolución de la CES sobre la necesidad de una acción de la UE para proteger a los trabajadores de las altas temperaturas 

Aprobada en la reunión del Comité Ejecutivo de 18 y 19 de diciembre de 2018 

Antecedentes 

Cuando en el lugar de trabajo hace demasiado calor, es más que una cuestión de comodidad. Cuando la temperatura sube demasiado, como ocurrió en el verano de 2018, puede convertirse en una verdadera cuestión de salud y seguridad. Puesto que es probable que las temperaturas medias aumenten en los próximos años como resultado del calentamiento global, este es un problema que probablemente aumentará. 

También es un problema que suele ser relativamente fácil de resolver, lo que demuestra el valor de las campañas de salud y seguridad llevadas a cabo por los sindicatos. 

Altas temperaturas: ¿Qué está en juego? 

Cuando los trabajadores tienen demasiado calor, corren el riesgo de marearse, desmayarse y sufrir calambres por el calor. En condiciones muy calurosas, la temperatura de la sangre del cuerpo aumenta. Si la temperatura de la sangre supera los 39°C, existe el riesgo de que se produzca un golpe de calor o un colapso. Cada vez hay más pruebas de que el estrés por calor ocupacional está relacionado con la enfermedad renal entre los trabajadores que trabajan al aire libre. Incluso a temperaturas más bajas, el calor provoca una pérdida de concentración y un aumento del cansancio, lo que significa que los trabajadores tienen más probabilidades de ponerse en peligro a sí mismos y a los demás. 

Las altas temperaturas significan un aumento en la probabilidad de accidentes debido a la reducción de la concentración; palmas de las manos resbaladizas y sudorosas, así como un aumento de la incomodidad de algunos equipos de protección personal, lo que puede dar lugar a una reducción de la protección debido a un uso inapropiado o a la falta de uso. 

El calor también puede agravar otras condiciones médicas y enfermedades como la presión arterial alta o las enfermedades cardíacas debido al aumento de la carga sobre el corazón, así como la interacción con otros peligros en el lugar de trabajo o el aumento del efecto de los mismos. 

Las mujeres embarazadas corren un riesgo especial a causa de las altas temperaturas, por lo que es necesario adoptar medidas específicas para garantizar su protección. 

Normalmente las personas trabajan mejor a una temperatura entre 16°C y 24°C, aunque esto puede variar dependiendo del tipo de trabajo que se realice. El trabajo extenuante se realiza mejor a una temperatura más baja que el trabajo de oficina. 

La necesidad de actuar a nivel de la UE 

Los trabajadores en Europa nunca deberían tener que trabajar a temperaturas que pongan en peligro su salud. 

Como principal bloque comercial del mundo, la UE debería liderar las condiciones de trabajo garantizando lugares de trabajo con temperaturas seguras. En una era de cambio climático en la que es probable que las condiciones climáticas difíciles sean más frecuentes y extremas, es esencial que existan los instrumentos legislativos adecuados para proteger a los trabajadores, con funciones y responsabilidades claras para los responsables políticos, los empleadores y los representantes de los sindicatos. Los problemas de temperatura a los que se enfrentan los trabajadores en Europa varían enormemente, al igual que los derechos a los que pueden recurrir para obtener protección. 

Las personas que realizan un trabajo extenuante y arduo corren un riesgo especial de sufrir temperaturas extremas, ya que las dificultades inherentes se ven agravadas por los factores de estrés adicionales causados por el trabajo, aunque las definiciones de lo que constituye un trabajo extenuante en toda Europa siguen siendo poco claras. Las protecciones de las que disfrutan los trabajadores en toda Europa varían enormemente. 

Los datos de la CES han demostrado recientemente que existe una amplia gama de temperaturas mínimas admisibles en los lugares de trabajo europeos en los distintos Estados miembros y sectores, desde sólo 4°C hasta 20°C, dependiendo del tipo de trabajo. Asimismo, los límites máximos muestran una variación significativa desde 18°C hasta 35°C. Algunos de estos límites son legales, otros se negocian colectivamente y otros son una combinación. 

Plan de acción de la CES 

Las organizaciones afiliadas a la CES apoyan abrumadoramente la acción a nivel europeo para proteger a los trabajadores de las altas temperaturas y para prepararse para un futuro en el que es probable que estos retos se presenten con mayor frecuencia. 

Por lo tanto, la CES se compromete a: 

• Trabajar, a través del Comité de Seguridad y Salud de la CES, para identificar una serie de acciones que promuevan el tema de las temperaturas de trabajo seguras y saludables. Esto incluirá el desarrollo de una guía para las afiliadas que aborde los diferentes ambientes y temperaturas de trabajo; 
• Plantear la cuestión de las temperaturas de trabajo inseguras tanto a la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA) como al Comité consultivo para la seguridad y la salud en el trabajo (CCSST) con vistas a dar mayor relieve a este riesgo; 
• Lanzar una jornada de acción en junio de 2019, programada para que coincida con el Comité Ejecutivo de la CES de junio, que generará publicidad para las demandas; 
• Pedir a la Comisión Europea que introduzca un instrumento legislativo que reconozca este mayor riesgo para los trabajadores y proporcione un marco para la protección de los trabajadores. Las condiciones meteorológicas no respetan las fronteras nacionales, por lo que se requiere una acción europea. 
• Exigir que las organizaciones europeas de empleadores se tomen en serio esta cuestión, dando orientaciones a sus afiliados sobre cómo pueden proteger a sus trabajadores de las temperaturas inseguras en el trabajo tanto en interiores como en exteriores. La CES está dispuesta a trabajar con los empleadores para desarrollar este aspecto. 
• Perseguir estos objetivos en el transcurso del próximo mandato de la Comisión Europea y del Parlamento Europeo.

UGT llama a establecer protocolos en las empresas para prevenir la ola de calor

Las altas temperaturas, factor de riesgo para la seguridad y salud en el trabajo

UGT recuerda que cuando la temperatura corporal alcanza los 40,6 grados, un golpe de calor puede causar la muerte hasta en un 25% de los casos e insta a extremar las precauciones ante esta primera ola de calor, especialmente en el ámbito laboral.

El sindicato exige a las empresas a que cumplan estrictamente la normativa de prevención de riesgos laborales y establezcan protocolos para evitar este tipo de riesgos.

Para aquellas actividades que se desarrollan al aire libre es fundamental el cumplimiento de la jornada intensiva de verano; gorras y cremas solares (que deben ser facilitados por el empresario) e hidratarse continuamente y realizar descansos a la sombra, entre otras medidas.

El sindicato insta a las administraciones públicas y la Inspección de Trabajo a aumentar la vigilancia en el cumplimiento de la normativa.

Frente a las altas temperaturas de estos días y las olas de calor que se avecinan en esta época estival, UGT advierte sobre los riesgos que conlleva realizar trabajos a la intemperie o actividades en lugares cerrados como cocinas, hornos, etc. donde sin duda se puede llegar a temperaturas extremas.

Las altas temperaturas pueden poner en serio riesgo la salud de estas personas. Por ello, el sindicato pide extremar las precauciones y el estricto cumplimiento de la normativa por parte de las empresas, en lo relativo a la prevención de riesgos laborales. Insta especialmente al cumplimiento de la jornada intensiva de verano para aquellas actividades que se desarrollan al aire libre.

El sindicato alerta sobre la clara infranotificación de este tipo de accidentes, derivados de estar expuestos a altas temperaturas e insiste en la necesidad de adoptar medidas preventivas.

Es importante que trabajadores estén informados sobre los riesgos existentes en sus puestos de trabajo, así como de las medidas preventivas que deben aplicarse y que las empresas establezcan protocolos para evitar este tipo de riesgos.

UGT demanda, además, a las administraciones públicas y a la Inspección de Trabajo que extremen la vigilancia en el cumplimiento de la normativa y los convenios colectivos en relación con la prevención de estos riesgos laborales.

Algunos datos a tener en cuenta:

• Las altas temperaturas son un peligro para la salud porque nuestro cuerpo, para funcionar con normalidad, necesita mantener invariable la temperatura en su interior en torno a los 37ºC. 
•  Cuando la temperatura central del cuerpo supera los 38º, ya se pueden producir daños a la salud y a partir de los 40,6º la muerte. 
• Alcanzando esta temperatura, un golpe de calor puede causar la muerte en un 25% de los casos.

La exposición al calor puede causar diversos efectos sobre la salud, de diferente gravedad, tales como erupciones en la piel, edema en las extremidades, quemaduras, calambres musculares, deshidratación, agotamiento, etc.

Algunas medidas preventivas:

• En caso de trabajos a la intemperie, las gorras y las cremas de protección son fundamentales y han de ser facilitadas por el empresario.
• Hidratarse continuamente y realizar descansos a la sombra.
• Reducir la exposición al sol en horas en las que hace más calor. 
• Para ello es recomendable adaptar los horarios de trabajo para realizar la mayor carga de trabajo durante las horas en las que las temperaturas del ambiente no son tan elevadas.

Qué hacer ante un golpe de calor:

• Colocar al trabajador en una zona a la sombra y en un ambiente frío.
• Desvestirlo. Se recomiendan duchas con agua fría (15-18ºC). El agua no debe ser inferior a esa temperatura.
• Si el trabajador está consciente, suministrarle agua fría para beber. 
• Si está inconsciente, colocarlo en posición de seguridad, recostado sobre un lateral de su cuerpo, con la cabeza ligeramente ladeada, el brazo inferior atrás, extendido, el superior flexionado hacia adelante y arriba y las piernas flexionadas, más la superior que la inferior. 
•  Otra posibilidad es cubrir el cuerpo con toallas húmedas, cambiándolas con frecuencia y, preferiblemente, en combinación con un ventilador.
• Contactar con un médico y llevar al paciente al hospital lo más pronto posible. A menudo, pueden precisar oxígeno, la administración de suero por vía intravenosa y, algunas veces, medicación.